jueves, 6 de octubre de 2011

JOAN CARLES GIRALT, ESCRIPTOR SURREALISTA


En Joan Carles Giralt, es una de les peces més pintoresques de la anomenada “tribu MIFAS”. Aficionat a la elaboració casolana de la ratafia, sempre porta una a ma de manera inseparable. Però la seva principal faceta es la d’aquesta espècie de escriptor surrealista, que redacta escrits complicats per al gran públic que només ell entén, i que després fa arribar els seus suposats potencials lectors. A mi particularment m’envia molt sovint, de manera que tinc el meu correu completament saturat de dotzenes dels seus escrits.

Desde aquest blog, vaig la presentació de alguns dels seus escrits, d’estil surrealista, un gènere literari encara no gaire conegut.




Como repeler depresión y tener descomunal excitación de neuronas presagiando de que es de “puta madre” colgarnos, nadie (puede que sin percatarse) quiere tener pálpito de la “mierda” que como millones de millones de “años” a de ser este mundo (nadie debe ser feliz civilizándose, siempre será de ”puta madre” la “contundente” explosión y destrucción masiva que ejerce una catástrofe), este es el mundo de sanguinária y truculenta batalla campal entre todos. Cuantos más estudios y civilizados más costarte depresión y profetizar este desanimante melodrama, que es preludio de que la necesidad de todos es viveza en cualquier acto terrorista (alberga a fechorías, peleas, crímenes, atentados y guerras). Intentar tener neuronas excitadísimas deseando topetazo de genialidad, es el colgarnos por deber ser este mundo viveza en la devastadora apocalípsis (disturbio de briosos simios, dinosaurios, reptiles, felinos, aves, bestias acuáticas, alimañas o tanto dá), el todos melenudos por no cuidarnos que ni nos vestimos por tener el cuerpo lleno de pelos o de cabellos por todas partes, que el deseo histérico que desea el cuerpo de todos por “tocada de cojones”, es por avivación de los meteoros a la degeneración llamada cáncer, el irrevocable núcleo energético del que por “tocada de cojones” nos pongamos coléricos, es el equiparado al que nos remite a la “brizna” del frenético que usamos brioso para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas), es como la furiosa reacción de esquizofrénia convulsiva que deseamos por avivarnos a cualquier otra herida o enfermedad (drogas, accidentes o sicopatías). Como de este macabra, tajante y férreo serial, es un altercado absurdo y demencial soterrarnos ponernos enconados y furiosos para paladear ufanamente este mundo, además de ponernos encrucijado y arduo propagar palabrotas y “cagarnos” con todos y con todo, ese es el lienzo por el cual nos cuestra abordar indagando ese tema, que es como decir de que cuantos más estudios y civilizado, más costar ensoñar como con el extracto de este desenlace (la anarquía devastadora de millones de millones de “años”). Todo este desanimante coloquio, cuanto más civilizados menos tener esos conocimientos nefastos (este mundo nunca deberá tener un cauce civilizado y cuerdo, es indisoluble el que deba ser masacre inconsciente del australopithecus erectus). Para clausurar o zanjar esta disertación, que como repeler depresión, debes infravaloar lacra de percibirla para tener temperamento ameno ejerciendo vida fastuosa y civilizada, tengo que ser oneroso y reiterar decir de que debes estar “hasta los cojones” de todo, para considerarlo que para tener ego positivo la sociedad subestima. No es un dote estar desanimado y como deseos de tumbarte en medio de la via del trén cuando tiene que pasar uno “suicidarte”, presagiar esta jerga que para ser feliz la sociedad repugna. Por más patochadas fictícias y erroneas que mumrure la radio o la televisión (escabrosas), nunca nos clausuraremos desmoronando el terrorismo, destrucción recíproca de todo, como por explosión de bomba atómica es lo mejor que pueder suceder, que es el peculiar considerar de un Dios o de descomunal y ralentizada depresión


Como costarte “cagarte” con todos y con todo, cuanto más estudies y te civilices que obviamente serás feliz y optimista, como costarte tener esta información que conglomerada es convicción de que debes suicidarte, te costará como propagar palabrotas y un fabular tajante y macabra, cavilar pronosticando sobre la matanza entre todos los seres vivos, que como millones de millones de “años” a de ser siempre este mundo. La enloquecida y sangrienta batalla campal entre simios, dinosaurios, reptiles, felinos, aves, bestias acuáticas, alimañas o tanto dá, la sectária australopithecus erectus, que si quieres paladear ufanamente este mundo, como forzarte a ser feliz por estudios o matrimónio placentero, te a de costar abordar e indagar este truculento tema (confeccionar este misántropo serial), el mundo sin casas y todos melenudos por no cuidarnos que ni nos vestimos por tener el cuerpo lleno de pelos o de cab3ellos por todas partes, que aparte de que es la intransigente Apocalipsis, no nos cuidamos ni nos vestimos “tocándonos los cojones” los meteoros y originándonos temperamento histérico, el cuerpo de todos se pone furioso cuando algo o alguien le “toca los cojones” (es por la avivación de los meteoros a la degeneración llamada cáncer), su irrevocable núcleo energético es el que nos remite a la brizna de reacción frenética que usamos briosa para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas), es como la colérica reacción de esquizofrenia convulsiva que deseamos por avivarnos a cualquier otra herida o enfermedad (drogas, accidentes o sicopatías). Toda esta retórica debes de tener nla depresión que estudiando y matrimónio placenterio “etc”, te degeneras para repugnar pálpito que la mejor soluiciñón es el colgarte como por topetazo de genialidad “rabia o genio por minusvalías o cárcel”. Debes de estar descomunal cohibido para presagiar esa causa desanimante que la sociedad (puede que sin percatarse ejerce soterrársela). Es un colosal altercado absurdo civilizarte y repeler vivir depresión, la descomunal excitación de neuronas necesaria para mejor morir, nadie debe ser feliz y civilizarse, cuanto más vivir tormento “apaleado y apalizado” mejor, este mundo a de tener un cauce de viveza en cualquier acto terrorista (alberga a fechorías, peleas, crímenes, atentados y guerras. Para clausurar o zanjar el desenlace de este contexto que e elaborado y que como temperamento férreo por depresión es una “cagada” y un contra sentido los fármacos y molificarnos el temperamento, diré de que lucidez de este dote, es el deseo de lanzarte al vacío desde lo alto de un rascacielos “suicidándote”, que como volverse desequilibrada, la sociedad infravalora esa depresión. Como el colgarte por depresión es análogo del colgarte por clarividencia a modo de neuronas excitadas. Nadie quiere estar absorto y tener pálpito de la masacre que como millones de millones de “años” a de seguir siendo este mundo. Como por repente de inteligencia, esbelto mejor deseo es colgarte. Cuanto más descom unal depresión, más el deseo de suicidio perpetrando l adestrucción masiva que ejerce ubna catástrofe de un Dios o terrorista suicida. Una enmienda inteligente a este “culebrón” que se puede canalizar destino a contra evolución, es a ponernos un cinturón repleto de bombas, immvolándonos en nuestro paso por medio de una colosal muchedumbre de seres vivos.


En este mundo que a de ser sin casas, incivilizado y sangrienta batalla campal entre todos, intentar desmoronar cualquier acto terrorista (alberga a fechorías, peleas, crímernes, atentados y guerras), es intentar de que este mundo no sea el que a sido millones de millones de “años”, es de “puta madre” la contundente explosión y dewstrucción masiva que perpetra una catástrofe, paras dialogar sobre ese negativo tema, debemos tener a las neuronas excitadas a modo de depresión, cuanto más civilizados más infralorar esa excitación, debiendo seugir siéndolo sempiternamente. Es decir de que nos cuesta cvailar siguiendo murmurando sobre ese negativo tema, porque nos forzamos a no “cagarnos” con todo y con todos insultando y teniendo temperamento misántropo. Nuestro forzarnos a no tener temperamento férreo y tajante, es a no tener lacra de este melodrama, que cuanta más lucidez, más resignarnos al colgarnos. Por la depresión que estudiando y civilizándonos repugnamos (puede que sólo dándonos cuenta de que nos incrementamos optimismo soterrándonos esbelto mejor considerar), presagiamos la matanza masiva entre todos los seres vivos, que conglomerado es análogo de vitotrear una catástrofe. Esta encrucujada premonición que mucha “gente” no entiende porqué le cuesta fabular y abordarla e indagarla, es la senda nefasta que se puede canalizar destino al pegarnos unn tiro en la cabeza suicidándonos. Forzarnos a no tener depresión es forzarnos a no tener neuronas excitadas. Es decir de que cuanto más nos forcemos a no tener conocimientos consternantes y melancólicos, es lucidez de todo este coloquio que nos estremece y nos damos cuenta de que es de “puta madre” colgtarnos, como la dinámica intransigente del australopithecus erectus, forzarnos a que nos cueste considerar lo que nos aboca a cohibidos y pesadumbre, es a que nos cueste pronosticar lo que como millones de millones de ”años” a de ser sempiternamente este mundo, la apocalípsis o recíproca destrucción masiva de ntodos y de todo que es desbarajuste de bestias melenudas por no cuidarse que ni se visten por tener el cuerpo lleno de pelos o de cabellos por todas paqrtes, el cuerpo de todos se pone histérico por “tocada de cojones”, eso es por la avivación de los meteoros a la degeneración llamada cáncer, y que su irrevocable núcleo energético esn el que nos remite a los deseos frenéticos que usamos briosos para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas). Cokmo causa que interiormente nos daremos cuenta de que es cojonudo “tumkbarnos en medio de la via del trén cuando tiene que pasar uno”, tajantmeente repelemos esos conocimientos, ese es el lienzo por el cual nosotros mismos no queremos tener mente desarrollada, dándonos cuenta de que este mundo nunca debe tener un cauce civilizado. Para clausurar o zanjuar lo de “puta madre” que parece tener clarividencia de este serial que estoy elaborando (este dote), diseminaré de que nuestro forzarnos a ser optimistas y tener conocimientos ufanos (placenteros), es adverso a tener esa coacción a lanzarte a un pozo. La inferencia de este serial, es que cuanto más nos forcemos a ser felices, más ofuscárnoslo teniendo un dédalo ser el artífice y profetizarlo.
Por la depresión que estudiando y civilizándonos repugnamos (puede que sólo dándonos cuenta de que nos incrementamos optimismo soterrándonos esbelto mejor considerar), presagiamos la matanza masiva entre todos los seres vivos, que conglomerado es análogo de vitotrear una catástrofe. Esta encrucujada premonición que mucha “gente” no entiende porqué le cuesta fabular y abordarla e indagarla, es la senda nefasta que se puede canalizar destino al pegarnos unn tiro en la cabeza suicidándonos. Forzarnos a no tener depresión es frorzarnos a no tener neuronas excitadas. Es decir de que cuanto más nos forcemos a no tener conocimientos consternantes y melancólicos, es lucidez de todo este coloquio que nos estremece y nos damos cuenta de que es de “puta madre” colgtarnos, como la dinámica intransigente del australopithecus erectus, forzarnos a que nos cueste considerar lo que nos aboca a cohibidos y pesadumbre, es a que nos cueste pronosticar lo que como millones de millones de ”años” a de ser sempiternamente este mundo, la apocalípsis o recíproca destrucción masiva de ntodos y de todo que es desbarajuste de bestias melenudas por no cuidarse que ni se visten por tener el cuerpo lleno de pelos o de cabellos por todas paqrtes, el cuerpo de todos se pone histérico por “tocada de cojones”, eso es por la avivación de los meteoros a la degeneración llamada cáncer, y que su irrevocable núcleo energético esn el que nos remite a los deseos frenéticos que usamos briosos para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas). Cokmo causa que interiormente nos daremos cuenta de que es cojonudo “tumkbarnos en medio de la via del trén cuando tiene que pasar uno”, tajantmeente repelemos esos conocimientos, ese es el lienzo por el cual nosotros mismos no queremos tener mente desarrollada, dándonos cuenta de que este mundo nunca debe tener un cauce civilizado. Para clausurar o zanjuar lo de “puta madre” que parece tener clarividencia de este serial que estoy elaborando (este dote), diseminaré de que nuestro forzarnos a ser optimistas y tener conocimientos ufanos (placenteros), es adverso a tener esa coacción a lanzarte a un pozo.
Concepto de un Dios o terrorista suicída, el mejor considerar de las cosas es que como por “tocada de cojones” descomunal depresión y deseos de destrucción masiva de todo, por depresión te dás cuenta de que es de “puta madre” lo devastador y sin casas que a sido este mundo millones de millones de “años”. Eso es descomunal excitación de neuronas, depresión y deseos de ponerte un cinturón repleto de bombas immvolándote en tu paso por medio de una muchedumbre de “gente”, la necesidad de todos te a de ser encrucijado pronosticarlo para ser optimista, es que este mundo a de seguir siendo la apocalípsis o destrucción recíproca de todos y de todo como la devastadora y sanguinária australopithecus eretcus. El disturbio de todos melenudos por no cuidarnos que ni nos vestimos por tener el cuerpo lleno de pelos o de cabellos por todas partes, que no debemos fabular sobre esa matanza que a de ser siempre este mundo para instaurar felicidad y civilización. El cuerpo de todos se pone histérico por “tocada de cojones”, es por la avivación de los meteoros a la degeneración llamada cáncer, su irrevocable núcleo energético nos remite a deseos de la brizna del temperamento frenético que usamos brioso para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas), él es el que nos coacciona a los deseos de colérica esquizofrénia convulsiva por avivarnos a cualquier otra herida o enfermedad (drogas, accidentes o sicopatías), como conocimientos que nos entorpecerán para ser felices, el desenlace de este negativo serial, como estudiar y civilizarnos para degenerarnos manifestar propagando palabrotas y “cagarnos” con todo y con todos, nos forzamos soterrarlo no presagiarlo ni percibirlo. Para clausurar o zanjar el cauce de este contexto que es preludio de que este mundo nunca deberá tener un cauce civilizado, a de ser la devastadora y sin casas incivilizada anarquía de tiempos inmemorables. Obviamente cuanto más estudios y civilizado más costarte tener depresión, ese es el lienzo por el cual nos cuesta abordar, indagar y solventar sobre que es “cojonuda” la explosión y destrucción masiva que perpetra una catástrofe. Como no forzarte a ser feliz con lucidez de todo este coloquio, parece rocambolesco no estudiar ni civilizarte sin encapotarte la sanguinária matanza masiva entre todos, que todos necesitamos de que siga siendo este mundo, viveza en cualquier acto terrorista (alberga a fechorías, peleas, crímenes, atentados y guerras). El extracto de la conglomerada necesidad de todos, es mente de ser Dios o depresión por vivir y para morir, en este mundo que no han de existir casas ni nadie debe ser feliz, agonizar delirando o gimoteando hasta la muerte es la necesidad de todos.

Como deseando rociarlo todo con gasolina pegándole fuego, incitándole a que explote colgándote, como el desequilibrado que te vuelves por depresión, debes de estar muy hasta los “cojones” de todo, para tener lucidez en el criterio de que este mundo a de seguir siendo la sanguinária Apocalipsis o destrucción masiva y recíproca de todos y de todo de millones de millones de “años” (este melodrama que voy a propagar), un considerar que debes soterrártelo para incrementarte felicidad, cuanto más feliz quieras de que sea tu ritual vivir portándote, como por estudiar civilizándote, más encrucijadamente debes percatarte de la “mierda” con deseo de temperamento histérico de todos que a de ser este mundo. No cuesta tener pálpito de que ataque de locura, es lo que todos debemos tener todos, desgobierno histérico incivilizado de mundo de, la recíproca y alienada anarquía devastadora y sin casas ni civilización de un documental truculento y bravío de la trele. El cuerpo de todos reacciona histéricamente cuando algo o alguien le toca los cojones, es por la avivación de los meteoros a la degeneración llamada cáncer, todos debiendo notarlo descomunal por ser melenudos debido al no cuidarnos y que ni nos vestirnos, el irrevocable núcleo energético que nos remite deseos coléricos por “tocada de cojones”, nos remite a deseos de la “brizna” de reacción frenética que usamos briosa para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas, es como la indisoluble e impetuosa esquizofrenia convulsiva que por avivarnos a cualquier otra herida o enfermedad nos coacciona a furia (drogas, accidentes o sicopatías). El desenlace de este abreviado melodrama que como causa que nos amarga la vida, cuanto más estudios y civilizados menos presagiarlo, es el pronosticar por descomunal absorto, es el Dios o desequilibrado que te vuelves por cadena perpétua, por rabia o genio desde minusvalías o cárcel, lacra de que lo mejor que puede suceder, viveza en la contundente explosión de todo, eso es este dote que estoy confeccionando, la mente rabiosa y como deseando propagar palabrotas cagándote con todos y con todo, el murmurar sangriento y devastador de todo extracto de este serial. Nunca será factible o viable civilizar este apaleamiento apalizamiento masivo entre todos que a de ser este mundo. Para clausurar o zanjar este negativo contexto que debes estar muy desanimado para ser el artífrice, diseminaré de que para ser feliz nadie quiere ser Dios con desmán de inteligencia, es esta descompresión de perpetrar terrorismo. La inferencia de este “culebrón” que nos cuesta fabular por forzarnos a ser positivos repeliéndolo por ser negativo y estremecedor (consternante). Debes de estar muy desanimado para que como postrado anímicamente, considerar de que este mundo a de ser sin casas y ataque de locura de todos, viveza en cualquier acto terrorista (alberga a fechorías, peleas, crímenes, atentados y guerras) Eso es lo que como la australopithecus erectus a de ser este mundo, una jerga que para ser feliz, te a de costar tener conocimiuentos y lucidez (platicando). Siempre será un altercado absurdo y demencial civilizar este mkundo, nunca será magistral y rocambolesco que nos mitiguemos a las neuronas. Apaleados, apalizados y asesinados de manera macabra siempre será “cojonudo”, una catástrofe es recopilar y componer mejor enmienda a este repugnante preludio.


Este a de ser el enloquecido mundo de tener todos temperamento histérico e irritante de millones de millones de “años”, el mundo sin casas y de briosa matanza masiva entre todos, que es intransigente y aúnque nos soterremos lucidez para ser felices (altercado absurdo y demencial), siempre será el mismo magistral la destrucción masiva que ejercen los terroristas, que la “contundente” explosión y descomunal aniquilamiento que ejerce una catástrofe o bien de Dios, eso es lo cojonudo que necesitamos todos, asesinados gimoteando o delirando de manera macabra para mejor morir, nadie debe ser feliz paladeando eufóricamente esta anarquía de mundo, éste debiendo ser la Apocalipsis o destrucción de todo y de todos como un documental bravío de la tele, el desbarajuste de alienados e incivilizados simios, dinosaurios, reptiles, felinos, aves, bestias acuáticas, alimañas o tanto dá que como disertación desanimante, cuanto más estudiemos y nos civilicemos más nos costará abordar e indagar ese nefasto tema. Es decir de que como estudiando y matrimonio placentero (entre otras cosas de ese ámbito o coalición), repelemos percatarnos del suicídio que es de “puta madre” por deber ser este mundo viveza sangrienta y delirante, una contundente masacre. El cuerpo de todos se pone furioso o colérico cuando algo o alguien nos “toca los cojones”, que su irrevocable núcleo energético nos remite a la “brizna” de reacción frenética que usamos briosa para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas), como lo que nos incita a alocada histéria, debemos notar descomunal esa avivación a la degeneración llamada cáncer por no cuidarnos ni vestirnos, por ser melenudos teniendo el cuerpo lleno de pelos o de cabellos por todas partes. Compatible a la reacción de esquizofrenia convulsiva que deseamos por avivarnos a cualquier otra herida o enfermedad (drogas, accidentes o sicopatías). El desenlace de este coloquio negativo y desanimante nos costará pronosticarlo y cavilar dialogando, cuanto más nos forcemos a no tener pálpito de lo consternante. Para clausurar o zanjar esta jerga que no es un “bien parido” dote conocerla con detalle, diseminaré de que como viveza devastadora en la australopithecus erectus, este mundo que parece geminado, tengo que ser oneroso y reiterar de que viveza en la sangrienta batalla campal entre (fechorías, peleas, crímenes, atentados y guerras), descomunal ataque de locura y apalear, apalizar, amordazar, rociar con gasolina pegándole fuego y gimotear hasta el óbito colgándote, todos debemos tener esa reacción de ser Dios o esquizofrénico. Es sólido y aplomado de que al forzarte a ser feliz, te generas un lienzo para infravalorar darte cuenta de esta macabra corazonada (esta negativa disertación), es como decir de que al incrementarte ser inteligente deseas tumbarte en medio de la via del trén cuanto tiene que pasar uno “suicidándote” puede que sin saber de que eso es un desmán de inteligencia, es como el colgarte por topetazo de genialidad (desmesurada rabia o genio por minusvalías o cárcel), por más patochadas fictícias y escabrosas que murmure la radio o la televisión, nunca será factible o viable desmoronar o erradicar el terrorismo e instaurar temperamento patricio para todos. Viveza en misantropías e insurgencias, como la explosión y destruccuión de vida civilizada y amena, es mejor y radiante acontecimiento.


Este es el mundo de locura histérica de todos, deseamos ese temperamento colérico por “tocada de cojones”, es lo que les ejercen los meteoros a todos los seres vivos (desbarajuste de incivilizados e impetuosos simios, dinosaurios, reptiles, felinos, aves, bestias acuáticas, alimañas o tanto dá), debiendo notar descomunal esa avivación a la degeneración llamada cáncer por ser melenudos, debido al no cuidarse y que ni se visten por tener el cuerpo lleno de pelos o de cabellos por todas partes, el irrevocable núcleo energético que nos coacciona a deseos histéricos por “tocada de cojones”, es el que nos remite a la “brizna” del temperamento frenético que usamos brioso para andar y movernos, es como el epicentro que nos hace desear la furiosa esquizofrenia convulsiva por avivarnos a cualquier otra herida o enfermedad (drogas, accidentes o sicopatías). Más ter costará fabular y confeccionar este contexto (abordarlo, indagarlo y solventarlo), cuanto más como forzarte a ser feliz consiguiéndolo más te fuerces a ser feliz paladeando este mundo. Eso es la lucidez siendo el artífice de este negativo dote que debes repugnar pronosticarlo para ser feliz, como deseos de tumbarte en medio de la via del trén cuando tiene que pasar uno suicidándote por topetazo de genialidad, rabia o genio por cadena perpétua (minusvalías o cárcel), darte cuenta de mejor reacción, es explosión masiva de todos y todos asesinados gimoteando o delirando contundentemente, nunca debimos civilizar la sangrienta batalla campal del australopithecus erectus.. Todo este conglomerado tener convicción y pálpito que debemos suicidarnos, cuanto más civilizado menos darte cuenta de que este mundo a de segtuir siendo la apocalipsis o destrucción de todos y de todo de millones de millones de “años”, nunca será factible y viable que sea “cojonnudo” civilizarlo. Es un colosal altercado absurdo y demencial forzarnos a soterrárnoslo “encubrírnoslo” para erigir nuestro estatuto civilizado, fastuoso y civilizado. Para clausurar o zanjar este deseo de explosión anímica que como murmurar devastador o sangriento, es mácula que demuestra llevar vida agonizante, deseando manifestar palabrotas, temperamento férreo y “cagarte” con todos y con todo, eso es esclarecer la causa de suicidio profetizando la realidad, tengo que ser oneroso y reiterar de que incrementándote optimismo, forzarte a ser feliz es subestimar esbelto mirífico considerar.

Como deseo de fabular sobre lo que nos desalentará el estado anímico, cargándonos de nostálgia y melancolía incrementándonos tener pálpito que es de “puta madre” colgarnos, para ser felices y optimistas nosotros mismos nos ponemos encrucijado percatarnos de la realidad (infravaloramos estar absortos), es la causa de suicídio que tajantemente nos la soterramos, descomunal rabia o genio percibiéndola, es como el desequilibrado que te vuelves por cadena perpétua (minusvalías o cárcel, persuadido de que es “cojonuda” la explosión y destrucción masiva que ejerce una catástrofe, debes estar muy absorto deseando el óbito para ser el artífice con clarividencia de este preludio), puede que sólo constatando de que nos acrecentamos ufanía, eso es el desenlace de este aterrador coloquio que estoy entablando y voy a confeccionar, la viveza en matanza masiva que a sido este mundo entre todos los seres vivos millones de millones de “años” que no queremos abordar, indagar y solventar, la enloquecida matanza entre todos los seres vivos que como millones de millones de “años” a de seguir siendo este mundo, el desbarajuste de simios, dinosaurios, reptiles, felinos, aves, bestias acuáticas, alimañas o tanto dá, que no debes pronosticar de que este mundo a de ser sangrienta batalla campal en su existencia si quieres paladear ufanamente todo lo que te suceda. Eso es lo que ejercemos al estudiar civilizándonos, repeler darnos cuenta de la Apocalipsis que como millones de millones de “años” a de seguir siendo este mundo. Como deseando colgarte, debes de estar muy cohibido para murmurar teniendo lucidez de esta jerga negativa, la alienada existencia de bestias melenudas por no cuidarse ni vestirse por tener el cuerpo lleno de pelos o de cabellos por todas partes, que el cuerpo de todos desea reacción histérica cuando alguien o algo le “toca los cojones”, es por la avivación de los meteoros a la degeneración llamada cáncer, que su irrevocable núcleo energético es el que nos remite los deseos de reacción frenética que usamos briosa para andar y movernos (los ojos, los dedos o muchas otras cosas parecidas), es como la colérica reacción de esquizofrenia convulsiva que nos hace desear por avivarnos a cualquier otra herida o enfermedad (drogas, accidentes o sicopatías). Como estudiar y civilizarnos para no cavilar negativo y desanimador, eso es porqué nos cuesta esclarecer la inferencia de esta jerga. Para clausurar o zanjar este foro negativo que forzándonos a ser positivos subestimamos, diré de que la coacción desde conocer toda esta premonición, es como el suicídio por depresión. El rocambolesco dote de elaborar lucidez de la intransigente australopithecus erectus, es un ensoñar nefasto que nos lo ofuscamos para erigir felicidad y vida civilizada. Como ejercer temperamento de ser Dios o terrorista suicida, una enmiendo magistral resignándonos a este bloque de corazonadas fictícias, es lo cojonudo que no queremos considerar, que es ponernos el cuerpo lleno de bombas, immvolándonos en medio de una muchedumbre de “gente”. Es un altercado absurdo y demencial encapotarnos esa apocalípsis que a de seguir siendo este mundo para forzarnos a instaurar paladear eufóricamente las situaciones, viveza en todos los actos terroristas es lo que siempre deberá ser (alberga a fechorías, peleas, crímenes, atentados y guerras).

No hay comentarios:

Publicar un comentario